miércoles, 22 de julio de 2020

POEMA 160


En la vieja cisterna invernal
veo mi rostro reflejado
en el agua fría, de pozo.
Es una cisterna abandonada,
corroída por los años.
Me gusta obsevar su profundidad
casi infinita y las sombras
que por las noches juegan en esas aguas.
La cisterna me transporta a otros momentos,
como un deja vu
y siento que he estado allí
¡Desde hace tanto tiempo!
Siempre mirando las aguas
te recuerdo
y me parece que estás a mi lado bebiendo...
Sí bebiendo agua clara y fría.
Mientras ambos reímos de un no sé qué...
La sangre ebullendo contrasta
con el tremendo frescor del agua.
Entonces me alejo con esa extraña sensación
de haber bebido juntos
una antiquísima pócima de amor.

Paula Cruz Roggero






9 comentarios:

  1. No hay mejor pócima de amor que quererse a uno mismo...el amor se da espontáneo o sino mejor dejarlo.
    Abrazos Paula.

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  2. Poema intenso, profundo, poeticamente delicioso de ler.
    .
    Cumprimentos

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  3. Bello poema, Paula. Recuerdos gratos que vienen a la mente en momentos de recogimiento. Un placer leerte.
    Abrazos con todo cariño.

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  4. Qué bonito es recordar de vez en cuando.
    Feliz miércoles.

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  5. La alquimia el amor no requiere bebedizos :-)

    Un abrazo

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  6. Tal vez al recodar ese pasado lleva a pensar que si no está en su presente será por algo.
    Un placer leerte

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  7. Da igual donde mires, cisterna o dónde sea, la poesía está en tu mirada.

    Besos.

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