La tarde se aproxima,
cuna de sombras
vértice de una mañana estéril
que lentamente se va.
Los sonidos del silencio
aúllan entre árboles de invierno.
En este frío coagulado
en la arteria invernal
sólo tu recuerdo es cálido:
fogata que no apaga ni el silencio, ni la soledad.
Basta observar las esquinas
entre estas cuatro paredes
para hallarte fulgurante
con los ojos ahondados de tristeza,
y un beso goteando de tu boca,
encendido entre las cenizas del ayer.
Cómo quisiera alcanzarte con mis manos
romper la distancia hermética
y traspasar la dimensión!...
Entonces cuerpo con cuerpo
festejar nuestras pieles,
apagar todo tu fulgor en mí,
prenderme en una llama yo.
...pero la tarde es sólo una arista de la realidad
Y no tengo más opción
que aceptar sus rincones oscuros.
Paula Cruz Roggero
Un poema hermosísimo, delicado, dulce
ResponderEliminarPaz
Isaac
Poema de pura sedução
ResponderEliminar.
Abraço
Otro poema pleno de hallazgos...
ResponderEliminarTe felicito. Abrazos y más abrazos.
Entre la añoranza y el deseo el amor se difumina sutilmente, tus bellas palabras nacen de un sentir muy intenso y sincero.
ResponderEliminarUn abrazo Paula, lindo poema
Poema donde siempre encontramos frases magistrales . Un fuerte abrazo !!
ResponderEliminar